martes, 10 de mayo de 2011

La Comarca Élfica (I)

Querid@ amig@,


Ahora te vamos a contar una bonita historia de seres maravillosos que, esperamos que disfrutes tanto escuchándola como lo hemos hecho nosotras escribiéndola. Todo empezó hace mucho, muchísimo tiempo, el mundo que hoy conocemos estaba habitado por numerosos seres; elfos, orcos, goblins, humanos, enanos... Ni siquiera existían los océanos. Todo el planeta estaba constituído por un único continente, sin grietas ni separaciones. Tampoco se producían guerras ni enfrentamientos entre países, ya que en esta época se convivía en paz y armonía. Pudo haber alguna que otra pelea entre diferentes razas, pero nunca acababan en baños de sangre o con heridos. En los países no existían monarcas, ni privilegiados ni no privilegiados. Tampoco verdugos que hacían rodar cabezas o niños incultos sin aprendizaje. Los más viejos enseñaban a los más jóvenes y estos ayudaban a los primeros. Era una sociedad internacional con un único estamento; los seres. Aunque, como siempre ha sucedido (y seguirá sucediendo), había seres con más inteligencia y con menos complejos. Estos eran los humanos. Ellos eran los exploradores con más destreza, los más valientes y los que más rápido aprendían. Con esto no quiero decir que fuesen los mejores, aunque algún que otro humano si que lo pensaba. En esta tribu (antes, la humanidad no era tan numerosa como actualmente) pronto se difundió la idea de conquistar lo conocido y extinguir a las demás razas. Preferiblemente a los elfos. Se podía decir que estas dos tribus nunca llegaron a convivir en plena armonía. Quizá porque físicamente se parecen un poco, o porque los elfos eran inteligentísimos (mucho más que los humanos) y además, excelentes magos con numerosas cualidades positivas que dejaban a los humanos en segundo lugar en el campo de la magia. Tuviesen las razones que tuviesen, así lo hicieron. Los humanos fabricaron armas, venenos y enfermedades (que a ellos no le afectaban) que en poco tiempo lograron hacer descender un gran número de la población. ¿A qué dio esto lugar? Pues a muchas muertes y a la incorporación de nuevas palabras al lenguaje; "odio", "ira", "traición". Seres cobardes como los enanos o goblins huyeron a cuevas donde, más tarde o más temprano, los humanos los encontraron y acabaron con ellos. Otros más valientes, como los orcos o los trolls, salieron al campo de batalla para luchar por la paz del pueblo. Los demonios (muy sabios también) se escondieron en el interior de la tierra donde jamás serían vistos por ningún ser humano viviente que pudiera hacerles daño, si no por humanos ya muertos que en su vida fueron malvados y ahora, arderían eternamente entre las llamas de este lugar, llamado Infierno. Los elfos no se dieron por vencidos. Crearon barreras protectoras mágicas y muchos hechizos, fusionaron animales y obtuvieron así una criatura sagrada, el Fénix (ellos simplemente lo llamaban Fénix). Este era un magestuoso ave de fuego que, al llegarle su hora, una llamarada lo abrasaba y en pocos segundos renacía de sus cenizas con forma de cría. Este era el medio por el cual el mundo donde antes vivían pacíficamente todas las especies (y actualmente poblado de humanos y demás) podía conectarse con una comarca en otra dimensión, muy, muy lejos. Allí los elfos en épocas bélicas habían huído para salvarse, y como eran tan pacífico, la noticia corrió hasta llegar a las puntiagudas orejas de todos los elfos. Decidieron ignorar a los humanos y abandonar nuestro planeta, así fue como esta raza logró estar en paz como lo estuvo en su día.


P.D.: No todos los humanos estuvieron a favor de extinguir a las otras razas. Varias personas escribieron en un diario cómo ocurrió todo esto. Este diario pasó de generación en generación, pero hubo muchos, y cada uno contaba diferentes cosas. Mucho más tarde, se recopilaron todos los documentos que hablaban sobre la Comarca Élfica, e hicieron un extenso libro con toda la información que actualmente está en una biblioteca de Mónaco. Más tarde, quizás otro día, seguiremos contando esta bonita historia.


Atentamente, Macarena y Rosa.

1 comentario:

  1. Hola!!!! Que buena historia, muy original, aunque os va a ser difícil escribirla, tenéis que documentaros mucho...pero seguro que lo hacéis genial!!! Makiii un beso!!!!!!

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